Hasta la declaración presentada en 2022 y que correspondía a los ingresos de 2021, no estaban obligados a presentar declaración quienes obtenían exclusivamente rentas del trabajo:
- hasta 14.000€ anuales, en los siguientes casos:
- cuando los ingresos procedan de más de 1 pagador y la suma del segundo y los demás supere los 1.500€ anuales
- cuando los ingresos consistan en pensiones compensatorias del cónyuge o anualidades por alimentos que no estén exentas
- cuando el pagador no practique retención por no estar obligado
- cuando los ingresos estén sujetos a una retención fija (determinados contratos de trabajo)
- hasta 22.000€ anuales, en los siguientes casos:
- cuando los ingresos procedan de un único pagador
- cuando los ingresos procedan de más de 1 pagador, pero la suma del segundo y los demás no superen en total en el año los 1.500€
En estos casos, cuando se habla de obtener rentas exclusivamente del trabajo personal se incluyen pensiones, haberes pasivos, pensiones compensatorias y anualidades por alimentos.
Sin embargo, el gobierno tiene sobre la mesa de negociación una nueva reforma fiscal y podría afectar a algunos de estos datos en 2023. Se cree que el mínimo de 14.000€ subiría a 15.000€, lo cual beneficiaría a las personas con las rentas más bajas. Sin embargo, también se espera que el mínimo de 22.000€ baje a 21.000€, obligando a declarar a personas que antes no lo hacían.
Conclusión: Deberemos esperar a que se apruebe la nueva reforma fiscal para conocer las novedades de la renta 2022.
¿Cómo te afectarán estos cambios?